PDT_Armataz_01_37 PDT_Armataz_01_37 PDT_Armataz_01_37 PDT_Armataz_01_37 PDT_Armataz_01_37 PDT_Armataz_01_37 PDT_Armataz_01_37 PDT_Armataz_01_37
Esta ruta merecería una crónica en condiciones porque la verdad es que ha sido como dice anémico: "De las que forjan". Hoy hemos salido de los Royos todos con una cornamenta como Dios manda y con algo más. Voy a sintetizar por lo menos lo que hemos vivido. Por mi parte tengo que pedir perdón ya que he llegado con Jesús 15 min tarde largos aunque luego eso no ha importado.
Salimos de los Royos con un poco de frío y empezamos a recorrer los primeros kilómetros por esos caminos de grandes fincas y hermosas vistas donde se te perdía la vista en la llanura. No teníamos ni idea de lo que vendría después. Primero aguanieve, luego nieve, y luego un nevazo de los que hacen época, pero así durante casi más de 1 hora. Pasamos por la casa de un humilde casero que nos cuenta como va la vida por allí y seguimos hasta alcanzar el nacimiento de una fuente natural con un gran platanero que hacían una preciosa estampa. Pasamos cerca de un castillo árabe, una ermita y seguimos haciendo haciendo kilómetros con la nieve en el manillar de nuestras bicis. Pequeña bajada donde las ruedas se deslizan ligeramente por la nieve y empezamos la rambla. Aquí deja de nevar pero se gana en diversión, con mucha agua, piedras y arenas movedizas hacen que la ruta no sea tan monótona y pistera. Salimos de la rambla antes de tiempo, craso error, ya que podríamos haber seguido y ahorrarnos un tramo de barro. Desde ahí practicamente hemos tenido que ir arrastrando las bicis por el barro durante 5 km (que se dice pronto) pero que nos ha llevado casi más de 2 horas de retraso, y muchísimo esfuerzo. Total que llegamos al pueblo a eso de las 4 pasadas. Manguerazo a las bicis, platicos de carne asada y casi al atardecer de vuelta pa Murcia.
Esta ruta resume para mí lo que es la esencia del mtb, esa mezcla de aventura, diversión, sufrimiento y locura que hace que luego te acuerdes al paso del tiempo y puedas contarle a los demás: ahí estuve yo, en medio de ese nevazo y arrastrando la bici para llegar al pueblo, anda que no sufrimos...
Una experinecia irrepetible, si señor, si la ruta no hubiera tenido nieve, rambla y sobretodo barro no hubiera sido lo mismo, y a veces, como decía Pela69 en los momentos difíciles es cuando estás más unido a los demás, aprendes a valorar más las pequeñas cosas y maduras como persona. Si fuera todo coser y cantar ésta vida no tendría emoción.
Enhorabuena Amancio, gracias por meternos por TODOS los sitios por donde nos has metido, y por marcar de por vida el nombre de Los Royos en nuetra mente. Como no gracias también a todos los demás, que formamos una parte imprescindible también en esta gran comunidad del mtb.
Cada vez nos superamos más. Nos vemos, y si puede ser dando pedales.
Esta ruta merecería una crónica en condiciones porque la verdad es que ha sido como dice anémico: "De las que forjan". Hoy hemos salido de los Royos todos con una cornamenta como Dios manda y con algo más. Voy a sintetizar por lo menos lo que hemos vivido. Por mi parte tengo que pedir perdón ya que he llegado con Jesús 15 min tarde largos aunque luego eso no ha importado.
Salimos de los Royos con un poco de frío y empezamos a recorrer los primeros kilómetros por esos caminos de grandes fincas y hermosas vistas donde se te perdía la vista en la llanura. No teníamos ni idea de lo que vendría después. Primero aguanieve, luego nieve, y luego un nevazo de los que hacen época, pero así durante casi más de 1 hora. Pasamos por la casa de un humilde casero que nos cuenta como va la vida por allí y seguimos hasta alcanzar el nacimiento de una fuente natural con un gran platanero que hacían una preciosa estampa. Pasamos cerca de un castillo árabe, una ermita y seguimos haciendo haciendo kilómetros con la nieve en el manillar de nuestras bicis. Pequeña bajada donde las ruedas se deslizan ligeramente por la nieve y empezamos la rambla. Aquí deja de nevar pero se gana en diversión, con mucha agua, piedras y arenas movedizas hacen que la ruta no sea tan monótona y pistera. Salimos de la rambla antes de tiempo, craso error, ya que podríamos haber seguido y ahorrarnos un tramo de barro. Desde ahí practicamente hemos tenido que ir arrastrando las bicis por el barro durante 5 km (que se dice pronto) pero que nos ha llevado casi más de 2 horas de retraso, y muchísimo esfuerzo. Total que llegamos al pueblo a eso de las 4 pasadas. Manguerazo a las bicis, platicos de carne asada y casi al atardecer de vuelta pa Murcia.
Esta ruta resume para mí lo que es la esencia del mtb, esa mezcla de aventura, diversión, sufrimiento y locura que hace que luego te acuerdes al paso del tiempo y puedas contarle a los demás: ahí estuve yo, en medio de ese nevazo y arrastrando la bici para llegar al pueblo, anda que no sufrimos...
Una experinecia irrepetible, si señor, si la ruta no hubiera tenido nieve, rambla y sobretodo barro no hubiera sido lo mismo, y a veces, como decía Pela69 en los momentos difíciles es cuando estás más unido a los demás, aprendes a valorar más las pequeñas cosas y maduras como persona. Si fuera todo coser y cantar ésta vida no tendría emoción.
Enhorabuena Amancio, gracias por meternos por TODOS los sitios por donde nos has metido, y por marcar de por vida el nombre de Los Royos en nuetra mente. Como no gracias también a todos los demás, que formamos una parte imprescindible también en esta gran comunidad del mtb.
Cada vez nos superamos más. Nos vemos, y si puede ser dando pedales.
Victoria sin peligro, triunfo sin gloria.