Gracias a vosotros por participar de esta salida.
Como indiqué en la convocatoria, estaba previsto que fuera sencilla y a ritmo tranquilo, para que sirviera de introducción a la zona a quienes no lo conocían, pero lo que no preveía es que fuera tan numerosa, lo que inevitablemente hace que se ralentice más de la cuenta y se hagan menos km.
En cualquier caso, a quienes les supuso un esfuerzo mayor, mis felicitaciones por el pundonor que emplearon en acabar, sacando fuerzas de flaqueza. Animo y a seguir saliendo en bici para poco a poco mejorar la forma y poder disfrutar más de las salidas.
A quienes ya conocíais la zona, gracias por vuestra paciencia y colaboración para con el grupo.
Y a aquellos que les supuso un paseo, gracias también por saber esperar y amenizar las paradas charlando e integrando a tantos desconocidos.
Gracias también a Mario, Diegorro y el resto de compañeros que se encargaron de pastorear y vigilar el grupo para evitar mayores extravíos. Sin ellos, una salida tan numerosa y poco homogénea hubiera sido un descontrol total.
Fue una lástima la avería de Moisés a poco de comenzar y una gran suerte que contara con tan estupendos compañeros que se encargaron de ir a por el coche para recogerlo. Cuando queráis repetimos la ruta en petit comité para que podáis “recuperar la asignatura”.
En alguno de los pasos llegué a contar 52 ciclistas, era todo un espectáculo parar en una cresta y ver la auténtica serpiente multicolor que formábamos. Alguno de los senderistas y participantes en la prueba de orientación a pie habrá tenido pesadillas con nosotros.
Una pena también que parte del grupo se perdiera la bajada y subida por sendas antes de la bajada por los toboganes, al pasar de largo al producirse un corte.
Tenemos que aprender a estar más pendientes de mantener la visual con quien nos precede a fin de evitar estos cortes.
Aquí tenéis mis fotos:
Algunos sienten la lluvia. Otros simplemente se mojan.